Pero, ¿por qué tenemos esa actitud tan poco realista?¿ por que no podemos aceptar la muerte con la misma calma que las flores del ayer se marchitan hoy?.
El cambio, la desintegración y la muerte son algo natural; aspectos inevitables de la existencia. La muerte es la separación de la conciencia y del cuerpo, tras la cual el cuerpo se desintegra y la conciencia continua en otra vida. La muerte es por tanto, no una cesación, sino una transición, una transformación.
En la raíz de nuestras inquietudes y rechazos esta la ignorancia. Nos aferramos a nuestra propia imagen como algo permanente e inmutable y queremos que viva siempre. Este deseo puede no ser consiente, expresable en pensamientos o palabras, pero esta definitivamente ahí; esto explica por que huimos, luchamos o nos protegemos instintivamente cuando nuestra vida peligra.
El cambio, la desintegración y la muerte son algo natural; aspectos inevitables de la existencia. La muerte es la separación de la conciencia y del cuerpo, tras la cual el cuerpo se desintegra y la conciencia continua en otra vida. La muerte es por tanto, no una cesación, sino una transición, una transformación.
En la raíz de nuestras inquietudes y rechazos esta la ignorancia. Nos aferramos a nuestra propia imagen como algo permanente e inmutable y queremos que viva siempre. Este deseo puede no ser consiente, expresable en pensamientos o palabras, pero esta definitivamente ahí; esto explica por que huimos, luchamos o nos protegemos instintivamente cuando nuestra vida peligra.
Con esto no se quiere decir que sea malo tratar de permanecer vivo; la vida es, de hecho, muy preciosa; pero nos será de ayuda examinar la naturaleza del yo que no quiere morir. Lo malo no esta en el deseo de prolongar la vida, sino en la idea que tenemos de quien o que somos realmente.”¿Soy el cuerpo o cualquier parte del montón de huesos, sangre y carne?”: “¿soy mi conciencia?, “¿soy algo diferente de mi cuerpo y de mi mente?”
ENTONCES CÓMO MEDITAR EN LA MUERTE???
Primero debo entender varios principios Budistas que son innegables y que debemos tener en cuenta para poder realizar la meditación en la muerte:
1.- TODO ES IMPERMANENTE: todo tiene que morir, pero nos aferramos a la idea de que esto NO es verdad, los principios budistas nos enseñan que todo cambia y una forma de cambiar es morir para poder renacer con un nivel de consciencia mayor cada vez.
2.- EL TIEMPO PASA Y DECRECE TU PROPIO TIEMPO DE EXISTENCIA: Los segundos se convierten en minutos, los minutos en horas y así cada vez nos queda menos tiempo de vida, aunque pensemos al revés, que hemos vivido más, lo que realmente pasa es que nos queda menos tiempo de vida, nos guste o no, nos parezca este pensamiento macabro, es más que todo esto es; una forma realista de pensar, por lo mismo debemos aprovechar cada instante de vida y vivir en su máxima expresión de consciencia y superando las emociones y pensamientos negativos.
3.- EL TIEMPO QUE DAMOS PARA DESARROLLAR LA CONSCIENCIA ES POCO: Como practicantes o simpatizantes del Budismo, debemos entender que la mayor parte del tiempo, Sidartha Gautama, dedicó su vida al desarrollo de la consciencia, lo que le permitió alcanzar el nirvana, y todos nosotros debemos entender que si no desarrollamos la consciencia el significado de nuestra vida en este momento presente no tiene ningún sentido, pues nuestros actuales trabajos, logros, familia, autos y demás cosas superfluas, se irán tan rápido como llegaron y lo único que llevaremos la vida siguiente es nuestra CONSCIENCIA.
4.- LA ESPERANZA DE VIDA ES MUY INSEGURA: Debemos ser conscientes de que a pesar de que tengamos una edad juvenil, nadie nos asegura que podamos llegar a se viejos, especialmente en los actuales momentos donde existe un elevado nivel de descomposición social y antihumanización, pero sobre todo un elevado materialismo.
Haz pensado que es lo importante de verdad?. Qué nivel de consciencia llevarás a la siguiente reencarnación?
Byron Lara D.
byronlara.amigosdebuda@gmail.com
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